Carretera al infierno. (6)

     Han pasado ya muchas horas, me siento anonadada, como si acabara de salir de un trance. He encontrado la biblioteca, es mucho más grande de lo que yo pensaba. Y sostengo dos teorías, o la rubia no sabe lo que hay aquí, o quiere que empiece a entender las cosas sin que ella tenga problemas. Aunque no entiendo como hay tanta clase de libros siendo un albergue, casi todos son de medicina, mi teoría, alguien ha estado estudiando la forma de encontrar una cura o expandirla.
     Mire donde mire hay libros, la única ventana que existe es en el techo, y la puerta esta en el suelo. Un pequeño escritorio en medio, con libros en francés abiertos y subrayados. He descubierto apuntes en español, pero dice más de lo mismo, sangre del virus Aliena. Como si fuera esa la cura. Hay más libros en español, pero debo esperar a leerlos más tarde, he escuchado un ruido, creo que White a llegado, de todas formas ya no hay luz en la biblioteca.
   
[Cerebro Elena]
     -¿Has descubierto algo?-esta parada abajo de las escaleras, me mira con su cara dulce, pero se que esconde algo, me sonríe sarcásticamente, y me hace un gesto con la cabeza para que la siga. Lo hago, pero pego mi mano al cuchillo que tengo en el costado. Me lleva a la cocina, poniendo dos platos encima de una de las mesas, me ruge el estomago, no he comido en todo el día, pero ahora mismo me estoy sintiendo culpable por Theb, no me he acordado de el. Puede que haya muerto, White me esta mirando, va a empezar a sospechar si no actuó normal. -No esta envenenado- menos mal, piensa que es por eso. Comeré rápido e iré a verlo.

     Las alubias de lata no me han llenado mucho, sera más por la tensión, he salido pitando con una lata en la mano diciendo que tenia más hambre pero estaba cansada para hablar. Sospecha, lo sé. Pero no puedo quedarme con la duda de si estará bien o mal.
     Para mi sorpresa, esta durmiendo de nuevo. No sin antes haberse comido todo las reservas que llevaba en la mochila. Ha dejado los envoltorios de chocolatinas y todo tirado. No ha sido capaz de dejarme ni una, me dan ganas de darle una patada, y yo preocupada por el, le gritaría si pudiera en este momento. Le tiro la lata a la cabeza, el se despierta rápido saltando de la cama. Aun mejor de lo que esperaba, me esta apuntando con un cuchillo, gotas de sudor le caen por los lados de la cara.
     -Eres un cerdo-le veo apoyar una rodilla en el suelo de forma agotada, pero estoy tan enfadada que no le pienso ayudar.

[Cerebro de Theb]
     Esta maldita loca me ha lanzado algo a la cabeza, me sigue doliendo todavía. No estoy tan bien como me pensaba, el sobreesfuerzo de levantarme deprisa me ha agotado, aun así no podemos esperar mucho tiempo con Nutt acechando. Ya es de noche, cuando amanezca espero estar recuperado. Me da igual el como. Noto que mi cuerpo flojea, estoy apoyado totalmente con las manos en el suelo ella me mira preocupada y a la vez cabreada, entiendo que quiera dejarme morir, pero no el porque de estar alargando mi angustia.
     Estoy de nuevo en la cama, al final me ha ayudado, tiene más fuerza de lo que parece, bueno es normal. Tengo que llevarla al otro centro de investigación, pero sera mejor que lo haga ella, tengo que engañarla de alguna forma, no parece la misma que encerremos. A lo mejor a perdido ciertas facultades de memoria, y puedo utilizarlo a mi favor. Esperemos.

Carretera al infierno. (5)

[Cerebro de Elena]
     Ahora que esta bien tengo miedo de dejarlo solo y que se ponga peor, pero tengo que dejarlo o la chica rubia volverá y esta vez puede encontrarlo aquí. Con lo mal que se me da disimular, no creo ni poder mirarla sin sentirme culpable. Escucho pasos, debo salir de aquí, le echo un ultimo vistazo y la veo en la puerta esperándome. Se la ve muy fresca y jovial, seguro que no a tenido ninguna preocupación en todo este tiempo.
     -Tengo que salir, hablaremos a mi vuelta por la tarde, estas en tu casa, puedes visitar la biblioteca arriba en la buhardilla- Creo que esta chica me llevara por mal camino, y aun así tengo la necesidad de seguirla a donde haga falta, la veo salir por la puerta con una mochila y una escopeta al hombro.
     -¿Como te llamas?-Me daba una bofetada, me quedó en blanco mirándola como tonta. Ella ya esta muy lejos, pero aun así me ha oído, porque se ha girado y dicho White. Creo que ese sea su nombre, tampoco es que me haga falta ahora.

Creo que me estoy obsesionando con Theb, estoy otra vez con el observándole. Esta despierto mirando al techo, parece que tenga mejor cara, o sean imaginaciones mías.

[Cerebro de Theb]
     Estoy vivo, todavía no se ni como. No creí que pudiera superar un minuto más, pero algo caliente recorrió mi cuerpo por dentro, y la volví a ver agitándome, desde entonces me siento como renovado, no puede ser posible...

Carretera al infierno. (4)

[Cerebro de Elena]
     Sangre, no para de repetir en sueños, espero que este soñando.
     De repente parece tener mas fiebre, lo estoy viendo enrojecer, tengo que abrir una ventana soy yo la que esta entrando el pánico, el color que esta tomando no es natural, me lanzo hacia la ventana, pero solo consigo cortarme con un clavo suelto. Lo que me faltaba, morirme por tétano, ya esta todo ventilado pero sigue igual. Estoy encima de el observandolo agitarse, no puedo moverme o se caerá de la cama, pero la sangre esta callendo por mi antebrazo manchando su ropa.
     Se ha parado, no respira, no me puede dejar sola, no todavía, tenemos que salir de aquí. Lo agito frenéticamente haciendo que mi sangre vaya hacia todos los lados. Pero sigue sin moverse, se ha quedado blanco, mirando al techo con la boca abierta.
     Bien, esta vivo, se esta agitando de nuevo, le acerco un vaso lleno de agua al que he manchado con mi sangre por fuera y se ha manchado los labios. Esta tranquilo, sentado en la cama, como si no hubiera pasado nada, con el alboroto no se como no se ha enterado la rubia.
      Me echo un poco de agua en la herida y me seco las lágrimas que había derramado, ha sido un momento muy angustioso. No estoy preparada para separme de el todavía.

Carretera al infierno. (3)

[Cerebro de Elena]
      Creo que me acaba de insultar, le he visto sonreír, y veo que ninguno me va a decir la respuesta esta noche. Intentare descansar un rato yo también. Por muchas vueltas que de, no creo que consiga dormir, y eso que estoy totalmente agotada, pero son muchas cosas en las que pensar, realmente ahora no quiero morir sin saber todo lo que está pasando, puede que no sirva de nada, pero algo dentro de mi dice que debo averiguarlo.
     Esta estúpida carpeta no me dice nada, al final voy a acabar aprendiendo francés de tantas veces leerla, o volverme loca, lo que llegue antes.
   

     Ya esta amaneciendo, no he dormido en toda la noche, desde que me encontré con esa chica, ahora todas mis dudas son si yo me contagiare también. No hago nada más que mirar a Theb, supongo que se llama así, y si es un insulto pues también. No hace otra cosa más que dormir, espero que se ponga bien, de momento no le pienso decir nada a la chica rubia, no me sé su nombre, una hora hablando con ella y ni se me ocurre preguntarle, bueno tengo cosas más importantes, ella no me rebela nada.
      Serán las siete de la mañana, si voy ahora seguro que esta vez si me mata, pero no puedo estar más aquí sin saber respuestas. Además como siga escribiendo a este ritmo me quedo sin cuaderno en dos días.

 [Cerebro de Elena]
     Con no tener una flecha clavada al final del día me conformo, sé que es muy temprano, pero si hace falta me quedo mirándola hasta que se despierte accidentalmente incomoda. Tengo bien sujeta mi carpeta para que no pierda un solo papel. Otra vez estoy ante la puerta parada, pero esta vez es con razón, estoy escuchando voces, hay otras dos personas con la chica, mirando por la cerradura se ven dos tipos muy grandes, pero no entiendo nada de lo que dicen, ¿otro idioma más? de verdad, que suplicio, debí atender más en clase. Ahora si me hubiera servido. No es francés, y por descartado ingles, ni suena como el acento alemán...blood Aliena, eso sí lo he entendido, tienen palabras inglesas, y si no también, mierda vienen hacia aquí, Elena, ¿que saben mi nombre? malo, muy malo, debo esconder a Theb.
      Menos mal que corro rápido, he tirado a Theb junto a la carpeta debajo de la cama a tiempo, y ni ha rechistado. Me hago la dormida, se que están en la puerta mirándome, los veo en el reflejo de las ventana.
    -Aliena-dice uno, a lo que ella niega con la cabeza.
    -Vous devez la garder en vie-Le dice el otro tipo grande con una voz muy ronca, eso sí lo medio entiendo es francés, ¿Tu nos debes la vida? Sera una advertencia, o querrán matarme, lo principal, es una mentirosa, ha dicho que no ha visto a nadie desde hace mucho tiempo, y que también piensan que me llamo Aliena, o que tengo la enfermedad, no lo tengo claro. Voy a hacer como me despierto a ver que hacen. Vaya rapidez, ha sido girarme y estaba todo normal, lo mejor de todo es que no lo han visto a él, tengo todavía tiempo para, no sé, para lo que pueda hacer con él.
 
      Lo vuelvo a colocar en la cama, está despierto, lo ha visto todo desde ahí abajo. Me da las gracias por esconderlo, una cosa bien hecha, me alegro. Le doy algo de comer de la mochila, no puedo arriesgarme a salir fuera. Le cuento todo lo que he escuchado, a lo mejor sabe lo que significa, aunque mal, más o menos lo he memorizado. Me mira con cara sorprendida.

     -Sangre de Aliena, claro- dice muy bajito, su cara se ve muy pálida, parece más mayor de lo que realmente es, le veo meditar, Aliena es de lo que habla la carpeta. Me está mirando, no sé cuanto he estado en mis pensamientos.

[Cerebro de Theb]
     Por un momento lo veo todo solucionado, es su sangre la que me puede salvar, pero lo que dijeron los matones de Nutt y la chica rubia me han desconcertado. Si ella no es Aliena, ¿a quién hemos tenido encerrada durante meses?
     -¿Quien eres?-digo en un susurro, pero me desmayo, estoy muriéndome, veo una luz, la luz, supongo que ha sido una larga vida. Veinte años de soledad entrenando, para esto. Ella llega al final y me extiende su mano, es una alucinación o será el cielo, no creo a verlo ganado, pero me dejo llevar por este ángel que me acoge.

Carretera al infierno. (2)

[Cerebro de Theb]
     Desde que se sintió el ruido no ha dejado de mirar la puerta con una escopeta en la mano, empiezo a pensar que no es como pone en los informes. O eso o estoy delirando ya con la fiebre, no recuerdo que fuera un síntoma, pero quien puede contarlo llegados a este punto, yo creo haber perdido la facultad del habla, me siento incapaz de expresar nada, incluso de levantarme de la cama, me mira de nuevo y me sonríe, siento otra punzada y cierro los ojos del dolor, girándome para que no me vea.


     No se que hora sera, pero si que estoy muy cansada, necesito estar despierta y escribir es lo único que me esta manteniendo en este estado. Quiero salir, pero tengo miedo. Decidido, voy. Voy a cargarme con un par de armas y munición, nunca se sabe, espero que sea un animal. El psicópata esta durmiendo de nuevo. Cuando vuelva a despertarse estaré aquí.

[Cerebro de Elena]
     Repaso, si, lo llevo todo.
     Primero despacito como en todas las películas, asomarme sitio por sitio, porque si me asomo despacito no me va a pasar nada. En la teoría funciona. Se ve luz, bien, espera, estoy teniendo un palpito, noto como se me acelera el corazón. Hay más gente viva, me estoy viendo correr hacía la cafetería, me doy cuenta de que puede ser un perturbado o un asesino en serie que ha sobrevivido, ya es tarde tengo la mano empujando la puerta,  para mi sorpresa hay una chica rubia sentada en la cama que vi antes, así que mira por donde, seguían utilizando este sitio, y si esta chica esta aquí tiene que haber más gente, no ha podido sobrevivir ella sola.
      Vaya, me a pillado por sorpresa, me esta apuntando con una ballesta, si quisiera, estaría muerta, pero la esta bajando, y viene corriendo, la tengo sobre mi y no se que hacer, me abraza.
      -Blaky, creí que te habían atrapado- me dice con una voz muy dulce, pero con notable acento francés, de cerca no parece tan dura como quiere aparentar, no se que a querido decir con eso, no recuerdo a esta chica, y por lo general recuerdo todas las caras. Ahora ella es la que me mira raro y se aparta un poco.
      -No eres Blaky, ¿verdad?- al ver que le hago un gesto con la cabeza de negación ella continua, moviendose rápidamente por la cafetería como si quisiera esquivarme. -Perdona, me he confundido con una vieja amiga, llevo tanto tiempo sola que cualquier cosa se me parece- me doy cuenta de lo que ha dicho, sola.
      -¿Cuánto llevas sola?-Noto que mi cara a bajado dos colores por lo menos, si puede ser posible, ha estado sola y no ha hecho ninguna locura. Me mira con una sonrisa sarcástica, puede que haya entrado en locura.
      -Casi desde que empezó la enfermedad, me vine aquí y no he salido desde entonces, no se cuanto a podido pasar, días, meses, no llevo la cuenta-parece que un brillo recorre sus ojos, pero se que no quiere llorar delante de un desconocido.
      -¿Podrías contarme acerca de la enfermedad?-realmente quiero saber lo que paso, y la carpeta no me revela nada, podría decirle que la lea y me la traduzca. No creo que haya nada peligroso, y menos ahora, en plan secreto de estado. -¿Sabes si hay más gente en algun lado?¿Aquí no llegan esas cosas?¿Porque no estas enferma?-Se me atragantan las preguntas, ella abre los ojos con curiosidad, le vuelvo a repetir las preguntas ya que no las ha entendido de lo rápido que han salido de mí, va hacía la ventana y mira el mar durante unos momentos, no se si va a contestar, por lo que me siento en una de las mesas.
      -Es muy tarde ya, deberías dormir, yo debería dormir, cuando amanezca intentare contestarte, y a la pregunta de porque no estoy enferma, es obvio no he estado en contacto con nadie, lo intrigante es que no lo estes tu, lo resolveremos en unas horas, y te lo advierto, no me despiertes- La estoy mirando perpleja, no me lo había planteado, el psicopata puede tener esa enfermedad, y llevo días con el. Voy a volver a la habitación, ella se a tumbado en la cama, no creo que me busque.
     Noto mi corazon ahora, estoy mirando la puerta, tengo que hablar con el como sea. Lo encuentro intentando levantarse, pero cesa cuando me ve entrar. ¿Estaría preocupado? Me siento junto a el en la cama, su cabeza sigue caliente, pero no tanto como ayer. Parece que descansar le esta sentando bien.

[Cerebro de Theb]
     Por un momento pense que me había dejado solo a mi suerte, odio tener que depender de ella. Esta hablando, pero la escucho en un eco distante, tengo que intentar concentrarme, puede ser importante. Escucho enfermedad, y preguntar por ella. No lo entiendo.
     -¿Tienes la enfermedad de los zombies? ¿Se contagia?- Algo no me cuadra en todo esto, porque me pregunta algo tan obvio que debería saber. Asiento con la cabeza. Pero al intentar articular palabras fallo. Se a apartado un poco de mí. Eso es miedo lo que veo en sus ojos.
     -No creo que tengas que preocuparte por ello, tu no enfermaras como yo, lo sabes- digo en un débil susurro que me agota. Me pesan los parpados, y noto como me agita y me llama psicopata. No tengo fuerza ni para odiarla. -Theb, gör krank- Me mira con ojos como platos, sabe que me he metido con ella. Me reconforta, puedo dormir tranquilo.
     

Carretera al infierno.

Jueves, 26 de Junio 2014
[De madrugada]
     Mi pánico se puede ver a kilómetros, la sensación de ahogo he impotencia también. Ha habido pocas veces que haya entrado en este estado, casi todas las veces han sido este último mes.
     He escuchado un ruido en la cafetería, estoy segura, me he despertado como un resorte. El también lo ha escuchado ya que esta mirándome, pero se que aunque vaya a comprobar lo que hay fuera estaré sola. Y es más ya el miedo de dejarlo sin protección y que me quede sola en el mundo. Es egoísta pero prefiero seguir arrastrándole he intentar curarle aunque me mate después.
     Tengo que empezar a controlarme, me asusto hasta de mi misma, de todas las sombras. El ruido ha cesado, querría pensar que no había nada, pero el lo ha escuchado y aunque delirantes, sus pensamientos también son válidos ahora.

Conociendo al enemigo. (3)

Miércoles, 25 de Junio 2014
     Me he quedado dormida, doy gracias que he podido descansar, no se ni como, sera que tenía las ganas de dormir reprimidas. Me voy a poner en marcha en cualquier momento, he comprobado que el estuviera bien, y sujeto para que no se lleve muchos golpes durante el viaje.
     Cuando he despertado lo he encontrado mirándome, tenia los ojos de color rojizo, no se si son imaginaciones mías, o es un síntoma más. He revisado rastro de sangre por si lo habían mordido o algo, en plan película que te muerden y de repente eres zombie, pero la única que hay es la reseca que le callo de la oreja. Aún así, tengo que encontrar una solución, no creo que pueda sobrevivir yo sola a esta locura.

[Cerebro Elena]
     Lo primero de todo es situarme, ir hacia un pueblo o algo que parezca un pueblo. No se ni donde estoy, pero seguro que esta carretera me lleva a algun lado. Realmente estoy preocupada, no se que esperarme cuando llegue al sitio, creo que estoy en otro país. No debi quedarme durmiendo mientras conducia él. Lo último que recuerdo fue Jaen. Pero el paisaje no tiene pinta de España.
Un cartel tirado en el suelo, no pienso bajarme. ¿Pero bueno, esto no va a tener como las autovias, con una direccion de entrada a alguna parte?.
      Un lago, otro lago, cartel tirado, arbol, me aburro. Anda mira un cartel en buen estado, Cogolin. Que chiste más bueno, lastima que no haya nadie para escucharlo. Casa quemada, más casas quemadas, arbol, menos mal que se preocupaban por el medio ambiente. Estoy viendo personas moviendose, me pregunto si estaran vivas. Tengo miedo de acercarme, dare un rodeo por esta carretera y aver donde acabo. Branches basses, sera algo asi como bandas sonoras, seguro. Es una lastima que este todo destrozado, esta calle esta llena de escaparates rotos,  parece la calle principal, una fabrica de pipas, creo que son pipas, ¿todavía se seguían haciendo estas cosas? estos franceses, me sorprenden. Si tubiera internet miraba en un mapa, espero no quedarme sin gasoil. Quiero una farmacia ya, y que tenga medicamentos a ser posible. Anda, más sitios de pipas. Por fin, estoy viendo una cruz verde, pompes funebres, ¿de verdad? lo tienen tan cerca por si no tenian solucion o que.

     Dentro de la farmacia no parece aver nadie, tiene todos los cristales rotos, al menos no esta quemada como el resto del vecindario. El psicopata duerme, debería ponerle un nombre, se le ve cada vez más palido, exactamente no se ni que medicinas coger, respira, espira, corre. Estoy dentro, ya no hay vuelta atras, no hacer ruido, drogas, drogas, cuaderno, drogas, espera. Hay una carpeta con informes, Aliena, ¿Quien es Aliena?, espera, creo que es una enferemedad. Me lo llevo y el neceser que hay aqui encima tambien.

[Cerebro Theb]
     Estoy mareado, he sentido todo el camino lleno de baches, no se que querra hacer conmigo, seguro que se quiere vengar y tirarme por un precipicio. No puedo hablar, siento el calor del sol en mi cara, caigo en mi incosciente y vuelvo a la realidad, creo que es la realidad, no le tengo seguro, alguien me esta mirando desde fuera del coche, sonrie. Esta agitando el todoterreno ligeramente, me gusta, hace que me relaje y cierre los ojos disfrutando del sol.
     ¿Se ha puesto el sol? Un disparo, otro. Ya no hay sonrisas que me miren desde fuera, hay sangre salpicando los cristales.

[Cerebro Elena]
     No puede ser, estan rodeando el todoterreno, como sigan asi lo van a volcar, gracias a que me he traido el arma. Estoy asalvo dentro, me vuelvo a la carretera a buscar un lugar seguro, desde el retrovisor veo como rodean más zombies a sus compañeros cadaveres en el suelo. No me siguen. Tampoco me voy a quedar a comprobarlo. El psicopata esta bien, creo que no se ha dado cuenta de nada de lo que pasaba, aunque sigue sudando.
     Huele a mar, seguro que estoy cerca de la costa, que ironia que esta sea la primera vez que la vaya a ver, en estas condiciones. Hay esta la arena, y el gran fondo azul. Realmente disfrutaria de esto, tengo que parar en algún lado, esto tiene pinta de estar fuera ya del pueblo, llevo un gran rato solo viendo arboles. Una gran casa, que parece un albergue, voy a cubrir el todoterreno, y bajar a inspeccionar el sitio, con suerte, podremos descansar unos días y el se recuperara pronto.


     Mucho ha pasado desde esta mañana, apenas tengo energías para escribir, pero lo hare por el bien para mi, aunque solo sea para no volverme loca. Encontre la farmacia y una carpeta dentro. La que voy a intentar ponerme a leer enseguida. He tenido que salir corriendo porque casi se comen los zombies a mi compañero, y ahora estoy en un albergue enorme con vistas al mar. Gracias a que habian tapiado todas las salidas lo unico que he tenido que hacer es revisar el resto del sitio, se estaban preparando bien aqui dentro, pero no creo que hubiera muchas personas. En lo que parecen los restos de una cafetería hay una cama grande, una radio, libros y provisiones de comida. El resto del sitio son habitaciones. No parece que haga mucho tiempo que se haya ido quien estuviera aqui.
     Estoy encerrada en un gran baño, seria del dueño, en el que hay una gran bañera, la he llenado y metido al psicopata aqui, si y con ropa, bueno interior, no pienso ir más haya. Lo más raro es que hay luz y agua. La que espero que me dure hasta que me vaya. Algo no me termina de cuadrar en toda esta situación, pero me volvere loca como siga dandole vueltas.
      Voy a leer la carpeta, aver si consigo entender algo...Se esta removiendo, bien, esta vivo.

[Cerebro de Theb]
     Estoy en agua, desnudo, ¿que? me quiere ahogar. Esta escribiendo en ese dichoso cuaderno, no me ha visto de abrir los ojos, es mi oportunidad de escapar.
     Mierda, he fallado, lo veo todo borroso, no se si tendre alucinaciones, pero juraria hasta que me esta ayudando. Me dejo hacer, me lleva hasta una cama, estoy sentado en ella, me esta haciendo preguntas, pero sera que la enfermedad no deja que mi cerebro lo asimile. Me obliga a comer algo, me sienta bien, tengo una pizca de esperanza, de que voy a durar un poco más de lo que pensaba. Pero debo advertirla.
     Me he vuelto a dormir, ella a juntado las camas de la habitación, y esta sentada encima mirando una carpeta, tiene el simbolo de Aliena. ¿Que querra hacer con eso? Espero que no sea demasiado peligroso que lo tenga en sus manos. Si me lleva con ella, es por algo.


     Se ha vuelto a dormir, he juntado las dos camas para tenerlo vigilado de cerca, por si le vuelve a dar espasmos, desde el baño parece que esta mejor, ya no esta sudando. Puedo quedarme más tranquila de momento. Espero que despierte pronto. Le he dado sopa que he encontrado en una lata, la he probado antes, asique estamos en igualdad de condiciones.
     En la carpeta cuenta sobre una enfermedad muy contagiosa, que se les ha escapado. Y que esa es la razón de que este el mundo asi ahora. Explica como curarla, pero no lo entiendo muy bien, tampoco el resto, odio el francés. Podía ser como un manual de instruciones y venir en varios idiomas, me conformo con el ingles. Me duele la cabeza, es de noche ya, he comprobado que nadie pueda entrar, y voy a dormirme un rato, bueno hasta que amanezca mejor dicho. Solo pienso en que nada me sorprenda, ni me mate. Tengo las armas debajo de la cama por si hay algun imprevisto..

Conociendo al enemigo. (2) [Cerebro de Theb]

[Cerebro de Theb.]
     ¿Estoy vivo? No veo nada, estoy en completa oscuridad, y no tengo fuerzas para moverme. Solo recuerdo sus manos en mi. Tirando de mi ropa.
     Noto la dureza de un suelo. Intento que mis sentidos se expandan, pero la debilidad de la enfermedad se esta haciendo conmigo, creo que estoy arropado, pero no se como es posible. Llevo un rato adaptandome a la poca luz que hay, agradeciendo que no me he quedado ciego, estoy en el todoterreno, la veo a ella, esta tumbada junto a mi, durmiendo, un rallo de luz cae sobre su cara ahora, huelo hierba. Estoy muy confuso, mi mente vaga de nuevo hacia lo más profundo de mi.
     La veo abrir los ojos y mirarme con preocupación, algo se ha agitado en mi interior, nunca había sentido estas punzadas en mi estomago, realmente moriré pronto, estaré perdiendo los órganos ya. No sabía que el cuerpo se desintegrara tan rápido, no puedo más, me estoy dejando ir de nuevo. Y aunque ella me agita y noto el agua corriendo fresca por mi cara, cierro los ojos y voy a la oscuridad.

Conociendo al enemigo. (2)

Martes, 24 de Junio 2014
     Tengo un serio problema, muy grande, le he disparado en la oreja, no adrede claro, pero aún así se ha desmallado, tengo el pensamiento de que acabare matándole, es un blandengue.
     Me ha dejado sola matando zombies, he entrado detrás de el, y nos hemos encontrado con cientos de ellos, se ha enfadado conmigo me ha lanzado un arma y toma aprende sola a defenderte, así como si fueran fáciles las cosas, y va, se desmalla y yo sola ante el peligro. Le he arrastrado de vuelta al todoterreno y estoy esperando a que se despierte. Que de gracias de que no le he dejado allí tirado, aun así no se que me hará por lo que le he hecho, no, le he salvado y ya.

     Acabo de volver al todoterreno, sigue en desmallo. He vuelto a entrar al centro a buscar comida y provisiones, se que me lo agradecerá, y por suerte no he encontrado más zombies, pero si comida en lo que parecía un despacho, sabían a lo que se enfrentarían aquí dentro, tenían reservas de latas y alimentos secos. Con los muros tan grandes que tienen no se como ha podido suceder tal masacre. La planta inferior a la que he bajado estaba completamente encharcada con sangre, he tenido que salir de allí corriendo a punto de vomitar. Y en la superior solo había restos de cuerpos, horrible.
     No se que hacer, tengo el maletero lleno de armas, comida y materiales que me han parecido importantes. Creo que voy a dormir un rato, le he hecho un hueco al psicópata en la parte de atrás con mantas, lo he arropado y echado un poco de agua, parece muy enfermo. Pero la oreja esta bien, a penas a sido un rasguño y esta ya curado.

     Estoy nerviosa y no puedo dormir, acabo de meter el todoterreno debajo de unos arboles y he cogido arbustos y los he puesto alrededor para camuflarlo, es frondoso este bosquecillo, podría valer, desde aquí dentro no se ve nada del exterior. No se como es posible que haga frío en junio, todavía me cuesta creer que este arropada.
     Lo estoy mirando moverse como en una pesadilla, pero le he intentado despertar y nada. Esta sudando, no se que hacer, le he puesto una camiseta empapada en agua, y las ventanas aunque tapadas, al estar bajadas entra el aire. Estoy en la parte de atrás con el, he quitado los asientos y se ha quedado todo al mismo nivel como un piso. Se me cierran los ojos, cuando despierte y haya luz buscare una farmacia.

Conociendo al enemigo. [Cerebro de Theb.]

[Cerebro de Theb.]
     Sabía que la tenía que haberla abandonado en las instalaciones de Madrid. Es una cría insoportable, que solo da problemas. Y casi nos matan por su culpa que es lo importante.

     Intento estar concentrado, no puedo permitirme alterarme por nada. No quiero ser cebo de Henos, zombies son zombies, ya no tengo porque llamarlos así.
     Compruebo de nuevo mi ballesta, todo bien. No nada esta bien, aquí debería haber cientos de franceses chillando con sus cosas y torturando Henos. Escucho pasos, alguien se ha caído, por todos los dioses, yo la mato, me ha seguido, solo se me ocurre volver a darle en el brazo, haciendo que proteste de nuevo. Si hay zombies aquí, estamos muertos.

      Avanzamos y empezamos a encontrarnos los primeros cadáveres. Sangre, restos de miembros y un olor horrible recorren los siguientes pasillos. Miro para atrás, ella esta arrugando la nariz ahora, pero no sale corriendo ni nada, es valiente, pero la odio por quitarme la máscara, ahora moriré pronto solo por su culpa. Hacerlo rápido seria un privilegio en este mundo loco.

     Mierda, nos han pillado por sorpresa, rápidamente le he dado un arma y estoy disparando mejor que nunca. Ella parece que acierta también, esperemos que siga así. Aunque parece que cada vez llegan más por el ruido de los disparos, doy una patada lateral a uno que se acerca con el cuello colgando de un hilo, lo que le hace perderla y que varios se avalancen a el. Es extraño como actúan. No lo pienso y voy a por ellos.
   
     Me están acorralando, y no la veo, esto se me ha ido de las manos. Siento un pitido en el oído derecho, y mucho calor, me mareo, se me cierran los ojos. Solo siento las manos de ellos.

Conociendo al enemigo.

Lunes, 23 de Junio 2014
     Dónde quedaron las noches de San Juan con sus hogueras y sus cohetes. Desde luego aquí entre jodidos zombies seguro que no, hogueras las hay, pero para quemar sus cadáveres. Y huele fatal.
Si, milagrosamente he sobrevivido, al final solo había unos veinte zombies que se quedaban atascados en la puerta al querer entrar todos juntos, por lo que disparando sin ton ni son pude con ellos. Bueno mi ahora compañero pudo con ellos, justo despertó al escuchar los disparos y me arrebato el arma, yo me quede mirándolo fijamente, mientras la sangre salpicaba.

     Ahora estamos fuera, vamos en un todoterreno negro, no me quiere decir a donde vamos, ni eso, ni nada, esta callado, observándome de vez en cuando escribir. Si no fuera un imbécil hasta lo consideraba mono. No ha hecho nada más que gritarme en alemán, lo que yo pienso que lo es, lo único que ha dicho en español ha sido niñata tonta y me ha traído arrastras hasta el vehículo. Cualquiera se bajaba mientras traía cosas.

     Llevamos horas aquí, va ha amanecer en cualquier momento. Y no hago nada más que quejarme. El aprieta el volante cada vez más, hasta a puesto los seguros. Estoy a punto de que me eche de una patada por el cristal. Intentar huir no ha funcionado, pero ahora se que entiende perfectamente mi idioma al dejarme bajar para ir al servicio en la gasolinera.

     No hay nada, y digo nada porque no hay ni vehículos por la autovía. Me aburro mucho, no me deja ni poner música. Así que me pongo a cantar Ana Torroja, por eso de la soledad.

     Me he ganado un golpe en el brazo. Lo odio.

     Al final me he quedado durmiendo, lo que parecen horas. Atardece, estamos frente a un gran muro de cemento, en plan lugar secreto del gobierno. Pero no hay francotiradores como en las películas, o algo va mal, o tengo mucha imaginación.
     Se ha bajado del todoterreno, y me ha dicho que me quede aquí, habla español perfectamente, lo sabía. Lo lleva claro que me voy ha quedar aquí. Voy a contar hasta cinco y entro detrás.

La luz del final. (6)

Domingo, 22 de Junio 2014

     No he dormido en toda la noche, he dado vueltas a tientas, recordando cada elemento de la habitación por si lo necesitara, la chimenea por fin esta apagada después de tantos días y hace frío. Las puertas están cerradas, y los abujeros bien sellados. He preparado mis armas, espero que funcionen. Estoy muy nerviosa, y al mismo tiempo aterrada, pero no puedo quedarme paralizada, no me lo puedo permitir. Vuelvo a repasar, la mesa esta en su sitio, casualmente todas las patas están en perfectas condiciones, para empujarla y tirarsela encima, un puñado de ceniza en mi bolsillo, y un ladrillo suelto de dentro de la chimenea aquí a mi lado. En las películas sale bien con menos cosas, así que seguro que a mi me sale perfecto.

     Estoy ansiosa, no se cuantas horas llevo mirando hacia la puerta, intentando percibir el mínimo sonido. Pero nada, parece que hoy se esta retrasando, hay esta, estoy escuchando los cerrojos, que raro, no me han dormido. Hay algo raro, y no voy a parar ha comprobarlo.

     Vale, que no cunda el pánico, estoy bien, no pasa nada, esto solo es mi imaginación, pero no lo es. Me falta el aire, me voy a desmallar en cualquier momento, he salido si, pero he tenido que volver a entrar y encerrarme con los pocos muebles que había apollandolos en la puerta, y si, tengo al perturbado aquí dentro dormido todavía, no lo he matado, lo he comprobado que respiraba, aunque lleva una mascara de esas de gas.

  

      Resulta que todo era peor de lo que esperaba... Cuando ha descorrido el último cerrojo se había avalanzado sobre la puerta, y yo sin pensarlo le he dado con el ladrillo en la cabeza, dejándolo seco en el acto. Tan contenta de euforia he cogido la mochila, he cerrado la puerta y me he introducido en los pasillos, parecían un laberinto de escombros, hasta que he escuchado gritos y disparos, quería huir de escucharlos, pero lo único que hecho es llegar al centro de todo, me encontrado mirando una escena de sangre, muerte y desolación.

      Desde una terraza estaba viendo el patio de la gran casa, con más gente con trajes negros y mascaras como la de el perturbado, y armas enormes disparando a otra gente hasta que he visto que no eran personas, bueno, todavía no tengo claro lo que eran, estoy como en una nube, y pienso que me voy a despertar en cualquier momento, sus cuerpos estaban desgarrados, comiéndose a los de las mascaras del suelo, como si de animales se trataran, habría cientos de ellos. No he parado para contarlos, he vuelto rápidamente aquí, he cogido armas que he visto por el suelo, deseando que me sirvan de algo y que ninguno me haya visto ni me persiga. Esperando que el tipo que tengo delante me ayude a salir de aquí.

     El tipo este no despierta, le he observado lo que parece horas, acabo de quitarle la mascara, tiene un pelo negro carbón y los ojos azules, si le he abierto los ojos, si los hubiera tenido de algún color raro lo hecho al pasillo con los bichos esos. Pero por mucho que le he removido no se ha inmutado. He observado su reloj, mirando minuto tras minuto, esperando que todo esto acabe, o yo me despierte, o el se despierte, pero nada, apenas ha pasado una hora, desde aquí no se escucha nada, pero no pienso salir a mirarlo. Tengo miedo, mucho miedo, más que nunca, y no se que hacer.

     Este día se me va ha hacer eterno, son las nueve de la tarde, se escuchan como pasos fuera, pero arrastrándose, quiero pensar que no son esas cosas, pero todo indica a que si lo son, los gruñidos no son naturales, estoy con lo que parece una ametralladora apuntando a la puerta, el tipo no se despierta, estoy sola en esto y como tiren la puerta abajo estoy muerta. La están arañando y noto como la empujan, viendo que esta es la última vez que escribo, si alguien me lee, vaya, no tengo ni una frase ingeniosa.

La luz del final. (5)

Sábado, 21 de Junio 2014

     Me he despertado muy perturbada, con un terremoto haciendo desprenderse la escayola del techo y paredes, me he metido rápidamente debajo de la cama, a tientas, ya que se había ido la luz totalmente, ha durado lo que ha parecido una eternidad. Golpes fuertes se escuchaban por toda la habitación, haciendo un eco espeluznante, pensaba que se caería la habitación a cachos. Cuando he salido de debajo he ido rápidamente a por la linterna y hay boquetes por las paredes tamaño pelotas de tenis, al asomarme solo he visto polvo y destrucción, nada mejor me espera fuera de aquí, se me pasa por la cabeza suicidarme y que acabe todo esto. No hay esperanza, he sido una ilusa pensándolo, soy el entretenimiento de un perturbado, seguro que luego me comerá o algo peor.

     Estoy en un punto de no retorno, estaba tumbada en la cama acostumbrándome a la oscuridad, cuando he visto que estaban tapando los abujeros con algo, y tirar un bomba de gas por uno de ellos, rápidamente me he hecho la dormida, haciendo una mascarilla de la almohada, realmente no se como ha pasado, pero he aguantado bien, lo suficiente para verlo entrar. Se que es un hombre por el tamaño, y por la agilidad no tiene que ser muy mayor, aun así es un perturbado, ha dejado comida encima y se ha dirigido hacía donde yo estaba, boca abajo he sentido las pisadas hacía mi, no se si sabrá que lo he visto, pero ahora ya se por donde atacar, quiero salir de aquí sea como sea, y el loco que me tiene encerrada no lo va a conseguir.

      Tiene que ser muy tarde, aunque hoy no he tenido luz en todo el día se que han pasado muchas horas, de las cuales casi todas divagando para crear un plan estratégico. Mañana sera el día que se acabe todo, o salgo, o muero

La luz del final. (4)

Viernes, 20 de Junio.

     Estaba desangrándome, estoy segura, no estaba soñando, pero no tengo ni un solo rasguño. Se me viene a la mente una y otra vez los monstruos con forma de lobo atacándome, los dientes cerniéndose a mi piel, haciendo tiras de ella. Y yo escondida encima de la cama intentando zafarme, con un palo de la mesa. Creo haber golpeado y escuchar un ruido sordo. Pero ahora no creo nada. Estoy en la cama, en la misma posición que me quede cuando deje de escribir, puede ser que escuchara a los lobos y soñara con ellos.

     Estoy cansada, y solo quiero llorar y dormir, es muy confuso, no puedo más. Mi mente solo divaga, y no quiero volverme loca.

La luz del final. (3)

Jueves, 19 de junio 2014

     Creo que soy un conejillo de indias, solo me faltan que me pongan un cacharrito con dispensador de agua. Se cuando es de día o noche porque me encienden y apagan las luces. Como si eso evitara que siga haciendo vida en el gimnasio improvisado. Que huyera al escuchar algo metálico por las paredes no quiere decir nada. Cuando he despertado la puerta estaba cerrada, y bueno, al menos me queda leer, menos mal que son buenos clásicos.

     Han pasado como mucho dos horas, y han vuelto a apagarme las luces, tengo mi linterna inmortal, así que voy a seguir leyendo.

     No puedo leer más, estoy escuchando como ahullidos que cada vez se acercan mas a la puerta, ahora son arañazos. ¿De verdad? ¿Esta es la prueba que voy a tener? O los habrán soltado para matarme por que se han cansado. Sea como sea, voy a pensar una solución.

Pd: No tengo miedo, que lo sepáis. Se que me leéis.

La luz del final. (2)

Miércoles, 18 de junio 2014.

     Hoy es otro día mas, lleno de caras felices con ilusiones y esperanzas, el sol brilla do en lo alto y niños riendo... Que no, que eso sería muy aburrido, es otro día mas en mi cárcel de cemento y suciedad. No ha aparecido nadie todavía, no se que hora será, pero en algún momento mientras dormía han entrado aquí, han metido mas comida, un calendario, y libros, muchos libros. Están leyendo mi diario, seguro, así que, hola, os odio y no estoy loca.

     Esto esta demasiado tranquilo, debería asustarme pero no lo hago. Voy a entrenar y no vais a poder conmigo, que lo sepáis.

La luz del final.

Martes, 17 de Junio 2014.

     Ya no estoy en la habitación acolchada. Sigo sin saber donde estoy o como he llegado aquí, al menos tengo comida delante mía, y realmente me da igual si el pollo esta envenenado.

     La habitación es muy grande, seguro que estoy en una mansion o algo así. Aunque mayormente esta todo destrozado.

    

     He visualizado mis salidas varias veces, una ventana tapiada, una chimenea con llamas ardientes o la puerta que parece tener cerrojos de arriba a abajo. No puedo permitirme gastar las pocas energías que tengo en derribar la puerta, ni creo que lo consiga. Además, empiezo a pensar que me quieren con vida, sea quien sea el que me esta haciendo esto.

    

     Vaya, tendré que fijarme en todos los detalles, hay puertas secretas en todos lados. Mientras terminaba de comer se ha abierto un hueco en la pared, y como humana inteligente he ido a investigar. Es otra habitación idéntica a esta pero sin muebles ni puertas, con máquinas de ejercicio. Me lo tomare como una indirecta. Ha esta situación solo le falta una biblioteca llena de libros para gozar de la estancia.

     Empiezo a pensar que no voy a morir a fin de cuentas. Sigo con miedo, pero veo una pequeña luz de esperanza. O eso, o la luz que seguimos al morir. No me preocupa.

En medio de algún lugar extraño. (3)

Miércoles, 11 de Junio 2014

     No puedo dormir más. mi cuerpo se niega. Llevo más de veinticuatro horas despierta, mirando al reloj de mi muñeca con la linterna, la cual parece no acabarse nunca la batería. Mi vida ha pasado ante mis ojos millones de veces en estas últimas horas, y preguntas vienen a mi, haciendo que mi cabeza se sienta a punto de estallar. Creo que he llegado el punto en el que me he vuelto loca, pero no tengo fuerzas ni para hablar conmigo misma. Voy a morir aquí, sola, en una oscuridad que ya ni me aterra. 

Jueves, 12 de Junio 2014

     Estoy oliendo a comida, a carne asada exactamente. Mi mente esta vagando al último día de comida familiar; hacía frío y todos estábamos alrededor de la chimenea en la casa de campo, mi hermano quemando nubes con un palo y Coco intentando arrebatárselas. El olor de las chuletas me hacía la boca agua, estaba cansada. Habíamos estado corriendo toda la mañana jugando en la nieve, y me había empapado totalmente.

     Ahora solo estoy empapada en sudor y lágrimas.

     Mi agonía aumenta por momentos, apenas puedo moverme, he tardado más de una hora en escribir esto.

Viernes, 13 de Junio 2014

     Hay luz en la habitación, es tan blanca que me hace cerrar los ojos, apenas puedo ver. Han abierto un hueco en una de las paredes, mas allá solo hay oscuridad y frío, solo he conseguido arrastrarme un metro hacia el, cuando la han vuelto a cerrar. No puedo más, se me cierran los ojos y mi mente esta vagando constantemente, solo tengo ganas de dejarme llevar. 

En medio de algún lugar extraño. (2)

Martes, 10 de Junio 2014

     Creo que es martes, me siento como un martes, aunque en verdad no lo sé. Me han tapado la poca luz que tenía. Estoy completamente a oscuras con una linterna. No se si estoy en la misma habitación porque me acabo de despertar, no se que ha pasado, según leo se acercaban pasos, pero no recuerdo nada de eso, ni tengo hambre, ni de tener siquiera luz antes. No recuerdo nada desde que llegue, me están drogando, o yo tengo alucinaciones y no se ni lo que escribo. 

     Tengo la sensación que han pasado muchas horas, me siento agotada y sin vida. La linterna sigue funcionando perfectamente. La oscuridad me esta jugando malas pasadas, creo ver todo el tiempo a alguien moverse por la habitación y vigilarme. Pero cuando apunto con la linterna no hay nada. Voy a dormir, y esperar que esto sea solo un sueño, o que no vuelva a levantarme. Empiezo a creer que lo segundo sería mejor. 

En medio de algún lugar extraño.

Lunes, 9 de Junio 2014

     Lo sé por que he visto amanecer desde el hueco de la pared.

     Me aburro, no se que hacer aquí dentro, he golpeado todas las paredes, intentado escalar hasta la rendija de luz, gritado, y lo único que he conseguido es nada, la mas absoluta nada. ¿Como es posible que no se escuche nada? ni pasos, ni susurros, esto me parece peor que la idea de morir. Lo único que me consuela es poder escribir, y ya no se ni que escribir, porque no estoy haciendo nada. Voy a llorar, jo, lo estoy haciendo, y no quería. Quiero salir de aquí. Quiero irme con mis padres y me da igual decirlo en voz alta. Es el peor lunes de mi vida.

     He estado sentada en la esquina de la habitación pensando en lo bien que me iba en el pasado, y nunca me había dado cuenta de ello. Suena al final de una película romántica, pero hay que aprovechar hasta el día en que parezca más desastroso, porque puede pasar lo que me esta pasando ahora, despertar y esto. Sin un solo libro. Ni comida. Ni familia. Ni novio, no me ha dado tiempo. Pero que asco de (apocalipsis, masacre alien) lo que sea. Y encima estoy cansada de dormir, jamás pensé que lo estaría.

     Estoy escuchando pasos, no estoy sola, aunque era obvio, estoy pegada a la pared mientras escribo, se acercan...

En medio de la nada. (3)

Domingo, 8 de Junio 2014
     Acabo de parar en la entrada a Madrid, no se si es buena idea. Pero no quiero adentrarme más de momento, hay luces más adelante. Yo estoy en una oscuridad absoluta, metida en una cuneta entre dos arboles.
     Es la una de la madrugada, estoy horrorizada por lo que ha pasado, el viaje no me ha tranquilizado en absoluto. De lejos vi como las avionetas lanzaban bombas contra la casa del vecino y la destrozaban totalmente, volviéndose todo oscuridad, polvo y ruinas.
     Me he dicho que no voy a llorar, y no lo voy ha hacer, todavía tengo la esperanza de que me espere algo bueno. Pero no puedo dejar de pensar que han intentado matarme, que llevo mucho tiempo sola, y que no se que paso durante los anteriores seis dichosos meses. ¿Sera esto el infierno? ¿El purgatorio? Mi paranoia aumenta por minut....

     Creo que ya ha pasado todo, estoy agazapada en el hueco que hay debajo del volante, realmente no se ni lo que he visto, he escuchado a alguien correr y de la nada a aparecido una segunda persona sin el más mínimo ruido y la ha disparado, sin mas ha mirado hacia donde yo estaba y me he metido corriendo aquí abajo, es imposible que me haya visto, estaba ha más de quinientos metros, y yo estoy en la oscuridad, y diez minutos después ha aparecido un helicóptero y se lo ha llevado.
     Tengo un miedo atroz, ¿así es como voy a acabar? muerta sin saber el como, ni el por que, no es justo. Al menos sera rápido. Pero no, me niego a morir así. Lo que no se es que voy ha hacer a partir de ahora, no se ha donde ha ido la persona del arma, y de momento este huequecito me parece muy seguro y confortable, estoy cansada para mucho más.

      Mierda, me he dormido, no se que hora es, ni creo que lo vaya a saber. Estoy en una habitación, por la que entra solo una linea de luz, y no veo puerta ninguna, ni salidas, con las paredes blancas y acolchadas. Lo conseguí, sabía que acabaría en un manicomio, al menos me han dejado mi mochila conmigo, es un gran paso, puedo seguir escribiendo, aunque no sirva de nada, por lo menos no hablo conmigo misma y no me vuelvo más loca, de lo que estoy ya me refiero. ¿Me estarán vigilando? Sea como sea, estoy muy cansada, y como no me han matado, querrán experimentar conmigo o algo así, que me despierten.

En medio de la nada. (2)

Sábado, 7 de Junio 2014
     Hoy me he levantado decidida y llena de energía renovada, voy a coger el todoterreno y me recorreré los pueblos cercanos, a ver qué encuentro. Tengo intención de volver a mi casa, aún así cogeré una maleta con cosas por si hay algún imprevisto indeseado.

     Son las siete de la tarde, he estado en tres de los pueblos, y las previsiones son peores de las de aquí, la humedad y la contaminación han hecho mella en casi todos los edificios, cubriéndolos con  maleza. Eso no es lo peor, sino la gran destrucción que hay, y coches quemados por todos lados, ni un solo cuerpo, se me hace extrañísimo que este todo tan vacío. Les dio tiempo a recuperar los cuerpos, pero no a quitar los coches. Estoy planificando ir al foco de todo esto, Madrid, hay tengo que encontrar más pistas de todo lo que esta pasando, no puede ser que este sola en este mundo, voy a hacer una lista de provisiones y me iré a la aventura.

     Estoy tumbada en la hamaca, mirando el cielo, triste realmente, echo de menos tantas cosas, mi familia, Coco, amigos, pensaba escribir el instituto pero no, realmente en tantos años de escolarización no me han servido de nada, me da mucha rabia.
      Estoy escuchando un ruido raro, parece una avioneta, pero no veo nada, voy a subirme al tejado del vecino a ver si veo algo.

      No me lo puedo creer, me han lanzado una bomba de gas, me he tenido que meter corriendo en la casa cerrándolo todo. Sera posible, la única viva en este dichoso pueblo y también la quieren matar. ¿Pero que demonios ha pasado? Menos mal que no me ha pasado nada, he tenido que saltar desde tres metros a mi patio. Me da miedo dormirme, y estoy pensando en irme ahora, pero veo una capa de gas en la calle.
      Hay más avionetas, yo me largo. Gracias que tenia las provisiones ya metidas en el todoterreno, iré con las luces apagadas de todas formas. Espero que no me sigan, me gustaría saber que ha pasado antes de morir.

En medio de la nada.

Viernes, 6 de Junio de 2014

     O eso pone en mi móvil.

     Se me hace raro escribir, realmente no sé por qué lo hago, no creo ni que nadie lo lea realmente, pero aún así lo haré para poder recordar y que no se me escape nada.

    

      Hace unas horas he amanecido en el bosque, casi enterrada bajo los grandes arbustos que se han ido apoderando de todo, no entiendo que me ha pasado, lo último que recuerdo es salir de mi casa, luego flash. Tengo la ropa en perfectas condiciones, como si nunca hubiera salido. He venido corriendo a mi casa, y no solo no había nadie, todas las casas estaban selladas con maderas y chapas por puertas y ventanas, hierba creciendo libre por todos lados. He cargado el móvil, pero no hay cobertura, la televisión tampoco funciona. Esta todo abandonado, como si llevaran meses sin estar aquí, hoy si que tengo miedo, realmente.

      Ha sido el apocalipsis y yo estaba perdida, seguro, o un ataque zombi, seguro que fue la enfermedad esa que dijeron en Enero, se extendió, o los aliens. Lo que si se, es que no me puedo quedar aquí sin hacer nada.

      He hecho una lista de todo lo que puedo llevar en mi mochila; linterna, mechero, spray pequeño, cuerda y el bate de béisbol de mi hermano. Para hacer un reconocimiento del pueblo, no quiero llevar mucho peso por si tengo que salir corriendo, lo de los zombis no lo descarto en ningún momento, y solo tengo como vehículo mi bicicleta, no hay un solo coche en la calle. Bueno, me deseo suerte a mi misma. Me rió, por no llorar, pero al mirarme al espejo me acuerdo de la película Resident Evil, pero en deportivas, y espero que sin muertos andantes.

     Bien, estoy viva, que es lo principal. 

     No había nadie por ningún lado, he sido capaz de encontrar un coche, no tengo carnet, pero tampoco hay nadie que me vaya a detener; lo habían abandonado con llaves y todo, ha sido un momento suerte, encima es un todoterreno que entran más cosas, he ido a la gasolinera y he llenado el coche y garrafas, quien sabe para que me hagan falta. También he estado en el supermercado, estaba todo abierto, cosas tiradas por los suelos rotas, estanterías vacías, sangre... hubo un caos espantoso por lo visto.

     Adentrándome en el centro del pueblo, veo carteles pegados por todos lados, de que una enfermedad se esta expandiendo rápidamente por el mundo, llamada SispilaC.O.P.A. Ósea que mi teoría es en casi seis meses ha cundido el pánico y la gente se ha marchado, dejando todo como estaba, pero la pregunta es ¿a dónde?

     En la plaza del ayuntamiento tenían una gran pantalla, y dentro una radio antigua conectada a unos grandes altavoces, me la he traído a casa porque me ha parecido escuchar algo, mis paranoias de nuevo, al menos estoy entretenida dándole vueltas a la ruedecita.

     Ya es tarde, se ha hecho de noche. He metido el todoterreno en el garaje, y cerrado las puertas con llave, aunque no se que puedo temer de un pueblo fantasma. Estoy tumbada en la cama pensando en que voy ha hacer a partir de ahora, tengo agua y luz, pero no se hasta cuando, y comida creo que podre subsistir a base de pasta y arroz. Podría hacer lo que quisiera, tener lo que quisiera, dentro de lo que este pueblo ofrece claro. No sé, voy a intentar dormir un rato, y mañana espero ver las ideas más claras.

Unos meses atrás. (7)

Jueves, 9 de Enero 2014

     Es la una de la madrugada, mis padres volvieron ya de noche y mi hermano todavía no ha vuelto, dicen que está en casa de David el vecino, que venían de allí y el se ha querido quedar, no me creo nada, la persiana de su casa esta bajada, y no he visto movimiento ninguno. Y si, he seguido toda la tarde mirando por la ventana como si me dependiera la vida de ello. Por lo que me estoy preparando para salir de casa a hurtadillas y ver por mi misma que es lo que está pasando, aunque me tengan que detener por allanamiento de morada.

Unos meses atrás. (6)

Miércoles, 8 de Enero 2014

     Son las cuatro de la mañana, estoy modo shock, no recuerdo haberme metido en la cama, lo último que recuerdo es estar en el sillón de mi habitación escribiendo. El resto esta como un flash de cámara. No puedo dormir, estoy paranoica totalmente, Coco esta encima de mi, para que luego digan que los animales no piensan, ha este perro solo le hace falta hablar.

     Al final nos hemos quedado durmiendo ambos encima de la cama, ya es tarde, no entiendo porque mi madre no me ha despertado, todos están actuando muy raro, por lo general hubiera entrado y alzado la persiana, sera por el hecho de que no hay cristal todavía, aún así es la hora de comer y de nuevo no hay nadie en la casa, esto se esta volviendo rutinario. Coco se mueve inquieto de un lado a otro, lo que hace que me ponga más nerviosa. No hay cobertura, ni señal para la televisión. Me siento como en una cueva encerrada, tampoco puedo ir a ningún lado por el estado de la calle, mi único contacto con el mundo exterior es el balcón, y hace frío para estar ahí.

     Me he quedado absorta mirando a través del cristal del balcón del salón, viendo como se mecen las ramas de los árboles, las alcantarillas rezumando agua, un gato viéndose atrapado, las persianas de los vecinos cerradas, gente corriendo entre los árboles del bosque,[...], me voy a comer y leer un rato, porque como siga mirando acabo un centro psiquiátrico, con una bonita habitación blanca y acolchada.

Unos meses atrás. (5)

Martes, 7 de Enero 2014.

     Día de reyes, pasados por agua. No ha llegado a inundar los regalos ni el árbol de milagro. Porque vivimos en alto. Pero si toda la cochera, el mejor regalo en este caso; cepillo y bomba para sacar el agua. Quién diría que este día me levantaría tan temprano, y no para pasarlo bien exactamente. Se me ha quitado las ganas de todo.

     He tenido un sueño muy raro, estaba en medio del bosque de al lado de casa, y había gente corriendo de un lado a otro, haciendo fogatas, y bailando al rededor. O tengo un subconsciente muy extraño, o tengo que dejar de ver tantas películas. Lo único normal ha sido soñar con el agua, que ya es un inquilino más en esta sociedad.

     Empiezo a preocuparme, lo de las desapariciones parece ir enserio, dos de mis vecinos han desaparecido, y hay unas marcas fluorescentes en la puerta de sus casas, pero parece que nadie se da cuenta de ello. Hay una conspiración, lo sé. Son las ocho de la tarde, y no hay una sola farola encendida, las calles están a oscuras, estoy con medio cuerpo en el balcón, y se escuchan a personas caminar, quien en su santo juicio sale a pasear en estas condiciones, y sin luces, me estoy asomando más, creo que estoy viendo a dos personas con unos trajes como de astronautas, hoy he tomado demasiado café.

     He ido corriendo al balcón del salón para tener mejor percepción, y estoy como asustada, pero sin el como, ya no sé lo que es real y lo que no. Estaba intentando asomarme más cuando algo me ha tirado para atrás golpeándome fuertemente la cabeza,  las luces se han encendido de repente cegándome, y no solo no había nadie en la calle, sino que había luz en casa de los vecinos. He ido corriendo a contárselo a mi hermano, pero como siempre cree que son imaginaciones mías, que el golpe me ha afectado, que soy tan patosa que me he resbalado con el agua. Puede que sea eso, no lo sé, me encuentro muy mal, me voy a la cama.

Unos meses atrás. (4)

Lunes, 6 de Enero 2014.

     Acabo de levantarme de siesta, son las seis, hoy a sido un día horrible. No solo la entrada al instituto estaba inundada sino que el pabellón y la biblioteca también lo estaban. Y aun así nos han hecho de dar clase todo el día, sin calefacción porque también estaba rota por el agua, y regañandonos por llevar el gorro en clase. A ver quien aguantaba el frío.

     Ayer después de dos horas de un precioso sol volvió a llover hasta esta mañana, no me habré mojado por la lluvia, pero los charcos los he catado casi todos. Y lo mejor es que estoy todavía sin cristal porque con este tiempo no quieren ponerlo. Esto es como un chiste sin gracia.

     No me lo puedo creer, hay una abducción masiva de los aliens, ahora enserio, están diciendo en las noticias que ha desaparecido diez personas en los últimos tres días, desde que empezó la tormenta. Solo en Castilla la Mancha, mi teoría es que se han ahogado con la lluvia, o los ovnis, me gusta la idea. Volverán y no recordaran nada como muchos casos que cuentan por internet. Tengo demasiada imaginación, seguro que algún día me servirá para algo. O moriré de la forma más horripilante, como dice mi hermano. Me encanta que me apoye en todas mis ideas descabelladas. Lo peor, o mejor según como se mire, es que él ayuda ha que se hagan reales. No tiene suficientes disgustos mi madre.

     

    

Unos meses atrás. (3)

Domingo, 5 de Enero 2014

     Llueve otra vez, esto parece que no se va a acabar nunca. Prefiero que nieve, de verdad, es más bonito por lo menos. Y añadiría que mañana no tendría que ir a clase. Pero como se dice, nunca llueve a gusto de todos. Por lo menos tenemos luz.

     Ayer fue un día caótico, al final mis padres aparecieron ya entrada la tarde, habían estado en casa de mi tía, un árbol había caído encima de su cocina arrasando con todo, y estuvieron ayudando a tirar cosas. Resulta que tenia una nota en el comedor contándomelo, que por supuesto no vi.

      En las noticias no hablan de otra cosa, parece que la historia de la enfermedad desconocida a pasado a un segundo plano, las tormentas están por todos los países. Es la cosa más rara que ha ocurrido jamás, que todos los lados de los hemisferios estén en esta situación al mismo tiempo. Al menos aquí no hay maremotos que arrasen con toda la costa, como en la costa de América, es un pequeño consuelo. Aunque están investigando que al parecer icebergs se están acercando peligrosamente a varios países del norte. Esto me recuerda a la película esa del día del juicio final, o algo así, recuerdo verla de anunciar por la televisión. De todas formas, no pienso salir de mi nido, aquí estoy calentita y segura.

     No me lo puedo creer, son las cinco de la tarde, y hace sol, sin una sola nube en el cielo. Va ha ser cierto lo del calentamiento global.

Unos meses atrás. (2)

Sábado, 4 de Enero 2014

     No tengo nada de ganas de estar despierta, no merece ni la pena. No tengo nada que hacer ni nada por lo que me apetezca vivir. Pero esta casa parece de locos y no me queda otra que levantarme de la cama y desayunar.

     Anoche hubo una tormenta horrible, arranco todos los arboles del patio y llovió como si no fuera ha haber un mañana. Los bomberos estuvieron trabajando hasta esta madrugada. Medio pueblo esta devastado, pero eso no quita que las señoras puedan quejarse por las calles quien lo paso peor.

     Lo que veo desde mi balcón no es nada bueno, el cielo esta negro como si todavía no hubiera acabado, parece un pueblo fantasma, hoy no creo que salga.

     Alguien dice por twitter que se acerca el fin del mundo, y la gente se vuelve loca, yo solo tengo sueño.

     Me he quedado durmiendo al final, y ya es medio día, alzo la persiana para que entrara luz, pero no solo no entra, sino que tampoco tengo cristal. La tormenta ha continuado mientras yo dormía y ni me he enterado. Acabo de recorrer la casa, y no se donde están todos, esto parece una pesadilla. No hay luz, ni cobertura, lo admito, tengo algo de miedo. Lo más sensato es recoger todas las velas de la casa y traérmelas a la habitación, o eso pienso.

     He bajado todas las persianas, de todos modos no va a entrar luz, cerrado la puerta de mi cuarto, y encendido un par de velas. Estoy acobijada debajo de las mantas de mi cama con una caja de galletas y zumo.

Unos meses atrás.

Viernes, 3 de Enero 2014

      Estoy tumbada en el sofá, quejándome como todo el mundo, supongo yo, de la incompetencia que hay en España en casi todos los sectores. Siendo parte de ello. Mi hermano me mira desde el otro lado de la habitación como si estuviera loca. Y quizá soy un peón mas de esta sociedad absorbente, pero prefiero pensar que no es así. Me tira un cojín a la cabeza, pero yo estoy divagando de nuevo, absorta en unos pensamientos que tienen vida propia.

     Han vuelto ha anunciar que miles de personas están muriendo en otros países debido a una nueva enfermedad desconocida, pero que no llegara aquí, dado que los controles de seguridad son muy eficientes. Pasan rápido a noticias más importantes para ellos como es el fútbol. Todos emocionados de cual equipo sera el ganador.

     Me río. Se que no lo podrán retener. Aunque ni me preocupo por ello. Y sigo tumbada escribiendo mis memorias como una paranoica en mi diario.

     

Comienzo

No se si amanece o el anochecer se me echa encima, pero aquí me encuentro yo sola en medio de todo el alboroto, con el sol tan bajo cegándome. No se si saldré de esta. Solo se que si yo muero, todos lo harán conmigo.